mitología infinita

A los 54 años le dio ritmo a la vida.

Ya no quería estar sola.

Ocho años después, de vagar con su imaginar,

Quería una compañía para su soledad.

Un mito más para esta poesía.

2 comentarios:

  1. Darle ritmo a los 54 es un poco tarde no? Ocho años antes decidì que no me pasara eso... :)

    ResponderEliminar
  2. Nunca es tarde, siempre es, más bien, temprano.

    ResponderEliminar

Dejar una nota