La pérdida de dos dos

 La pérdida de dos dos anula

toda posibilidad de juncos

y botecitos que pesquen

 

un paseo natural

por fuera de la ciudad.

 

Imposibilita explotar

el museo de fábricas

abandonadas, de casas

tapeadas con revoques

inacabados, no deja

entrar

el habla las columnas

descubiertas

las fotos de un cuaderno

se completan

pintan ornamentos

y banderas que flamean.

Qué puede ser cierto

si todo el trópico concentrado

está en la etiqueta

de una gaseosa atascada

en la reja de un desagüe.